Cuando Susana (17 años), cae en coma en la década de los 90, lo último que esperaba era despertarse de nuevo en 2024. Susana tendrá que hacer frente a una sociedad completamente ajena a la que conocía, madurar a marchas forzadas y darse cuenta de que lo más importante no es ni el amor romántico, ni la popularidad: es una misma y ser fiel a quién eres.